Pólvoras de Alerta, 2012. - 84 p.
Pushkin tuvo que editar este libro con un pseudónimo para evitar la crítica oficial de la revista literaria adepta al régimen zarista imperante, lo que le permitió tomar la inercia suficiente para que tras pasados unos años pudiera reconocer su autoría. Algo totalmente necesario cuando se trataba de un libro tan especial ya que encontramos en las Historias de Belkin a un Pushkin experimentando con fórmulas narrativa sin precedentes, inéditas en la literatura mundial, las cuales serán la base de la Rusia literaria en el futuro.
Cinco historias precedidas de un prólogo eficaz que encandila y empuja a leer el resto. Cinco historias donde las segundas oportunidades están presentes mientras la tradición literaria se fuga por la ventana dejándonos al mando del hilo narrativo. Pushkin es capaz de profetizar y ejemplificar géneros que todavía están en desarrollo, así encontramos que El disparo preludia la literatura psicológica. El Dueño de la funeraria abre el camino a la literatura fantástica y de terror que continuaría Poe al otro lado del mundo, mientras en La dama campesina insufla un moderno giro humorístico e irónico a la literatura sentimental del estilo de Jane Austen. La tormenta de nieve es un genial cuento de intriga, a la par con La parada de postas cuyo desarrollo queda más como un cuadro crítico de costumbres.
Pushkin machete en mano desbroza y abre nuevos caminos a la literatura rusa, a la literatura universal, mostrándonos una selva virgen de narrativa pionera, de nuevos géneros inéditos y que el escritor y el lector pueden disfrutar juntos.
Relatos: El disparo, La nevasca, El fabricante de ataúdes, El jefe de la posta, La señorita campesina